Llevo varios años sin trabajar, mi empresa se quedó en la quiebra, nos echaron a todos, y ahora sigo buscando trabajo. Es la hora de plantearme otra cosa porque siempre he buscado algo de mi sector, pero es que está fatal todo… gracias a un amigo me he dado cuenta que no sólo tengo que buscar trabajo del sector que he estudiado, que quieras que no si lo he estudiado es porque me quiero dedicar a ello vaya, pero que busque otras cosas que me gustan y me llenen aunque no me haya sacado la carrera para ello, puede ser la solución. Y una cosa que sin duda me gusta a mi desde siempre, es conducir. Empecé cuando me saqué el carné, lógicamente, mi padre me llevaba por las carreteras más difíciles que había para conducir, carreteras secundarias sin arcén, puertos de montaña, carreteras normales con las condiciones meteorológicas en mi contra… y así es como se aprende verdaderamente a conducir. Porque en la autoescuela es todo tan teórico…que luego es en la carretera donde ves la verdad de lo que pasa o puede llegar a pasar. El caso es que con toda esto, me di cuenta de que me quería dedicar a algo que tuviera que ver con conducir. Pero conducir un coche, el autobús por ejemplo lo veo demasiado para mi, y a la vez un poco aburrido, siempre las mismas rutas, parando en los mismos sitios…yo quiero diferentes cosas, diferentes calles, diferentes destinos. Por eso decidí investigar la licencia para conducir un taxi y todo lo que ello conlleva. Consulté a Servitaxi, una empresa que se encarga de la gestión integral de todo lo que tenga que ver con el taxi. Cómo conseguir la licencia, compra del vehículo… Así que estoy gestionando todo y voy derecha a ello, porque encima me están ayudando mucho en esta empresa, y están resolviendo todas mis dudas.
Lo bueno es que en Madrid conducir un taxi no es como en Londres, y no ya solo por la cantidad de coches y el enorme número de gente que hay. Si no ya porque los taxistas tienen que pasar un examen super difícil, según tengo entendido tienen que aprenderse todas y cada una de las calles de Londres… yo es una cosa que creo que no podría hacer, y lo digo porque he vivido en Londres y porque se cómo es, y de lo grande que es no veo cómo meterse cantidad de calles en la cabeza. No se a lo mejor ya no se hace así porque ahora con los GPS no debes de preocuparte por el tema, pero juraría que vi un documental hace no mucho y de que tienen que hacerlo así… claro que se tiran años para estudiarse las calles. Ya ves mientras otros estudian matemáticas, el cuerpo humano, o el sistema solar… otros estudian cómo ir de una calle a otra.
CONFIAR EN EL GPS
Pero vamos que como os decía, yo me quedo en Madrid, me cojo mi GPS… hombre también es cierto que las principales calles te las acabas aprendiendo porque si, sobre todo las que llevan a los sitios más famosos y conocidos o a las estaciones principales, el aeropuerto… pero aún así que viva la ayuda del GPS. Pero también deciros que no hay que fiarse siempre de la ayuda tecnológica… últimamente he hecho varias escapadas, no muy lejos de casa vaya, guiada por el GPS que me han llevado a sitios que no…
Primero empezó metiéndome por sitios que son como carreteras secundarias, que no tienen ni nombre y por caminos que algunos ni aparecían en el propio GPS que me hacía dudar si seguirlo o no. Luego hubo varios momentos que perdió señal y claro yo seguía adelante, pues nada, perdida, la señal y yo. Y en otra ocasión me confundí de desvío y él seguía el camino que yo tenía que haber seguido pero es que yo seguía otro, ni se redirigía ni nada… por suerte pude parar para poner el del móvil y bueno, algo me ayudó. Pero si pago 500euros por un GPS incorporado al coche y me lía la que me lía… no hacemos nada. No confiéis siempre en la tecnología.